NUEVO PROYECTO DE LEY DE FINANCIAMIENTO EDUCATIVO PARA LA CIUDAD
Por Andrés Cárdenas
Legisladores del Frente de Todos, representantes gremiales e integrantes de la comunidad educativa relanzaron un proyecto de Ley de Financiamiento Educativo en CABA que establece una asignación creciente de fondos del presupuesto total hasta rondar el 30% en 2032, ante el récord de falta de vacantes, problemas edilicios, recortes de becas y cuestionamientos al Estatuto Docente desde el ministerio de Educación de Soledad Acuña.
Luego de más de diez años de recortes consecutivos al presupuesto en Educación las cifras de la Ciudad de Buenos Aires resultan alarmantes, con un indicador neto que superó ampliamente marcas de años anteriores: para este ciclo lectivo al menos 56 mil niños y niñas se quedaron sin vacantes escolares en el distrito más rico de Argentina, prácticamente el doble del promedio de los últimos tres quinquenios.
En mayo de 2016 las entonces legisladoras porteñas Lorena Pokoik, especialista en Educación, y Paula Penacca presentaron un primer proyecto de ley en el mismo sentido, que no logró avanzar por “obra” de la mayoría de Juntos por el Cambio y sus aliados.
Ahora, a comienzos del mes de marzo de este año, la posta fue retomada por la legisladora y especialista en Educación María Bielli, quien junto a otros legisladores del bloque del Frente de Todos, gremialistas y diversos colectivos de la comunidad educativa porteña impulsan una nueva iniciativa que establece un aumento progresivo de la inversión en Educación dentro del presupuesto del Gobierno de la Ciudad entre los años 2022 y 2032 hasta llegar a un porcentaje igual o mayor al 30% del total de la partida presupuestaria anual.
“Desde el Frente de Todos se debe seguir dando la discusión por la madre de todas las batallas que es la Ley de Financiamiento Educativo, que es una ley que venimos impulsando desde hace muchos años en la Legislatura y que pensamos seguir propiciando. Por otro lado, debemos continuar dando el debate, mostrando y visibilizando aspectos positivos como la enorme cantidad de gente comprometida con el sistema educativo que hace que tengamos escuelas realmente increíbles y prácticas educativas muy potentes en la Ciudad. Hay muchas y muchos docentes comprometidos con la transformación de la escuela, partiendo de la potencia que tiene como motor para crear sociedades mucho más justas”, declaró recientemente Bielli a Proyectar Ciudad.
“La disminución sistemática del presupuesto educativo como la que viene llevando adelante el macrismo tiende a profundizar las desigualdades sobre las que hay que intervenir con políticas públicas. La educación tiene que ser una prioridad, no en los discursos, sino en las acciones de gobierno que deberían reflejarse en su presupuesto”, agregó.
Durante la presentación oficial del proyecto, el legislador y vicepresidente del bloque Javier Andrade destacó que los proyectos que se presentan para el sector educativo se estudian y producen en conjunto con trabajadores, familias y la comunidad educativa en general.
Por su parte, en el mismo evento la secretaria general de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), Angélica Graciano, dijo: “Hace 14 años el neoliberalismo gobierna la ciudad y hace 14 años que baja el presupuesto educativo”. “Esto tiene consecuencias arrasadoras”, continuó, y enumeró entre ellas la falta de vacantes, la interrupción en la entrega de computadoras a los alumnos durante la pandemia, cuando las clases eran virtuales, y el desfinanciamiento de las asociaciones cooperadoras.
ASPECTOS DEL PROYECTO DEL FRENTE DE TODOS
“En la ciudad, cuando Macri asumió como jefe de gobierno, teníamos 12 puntos más destinados a educación que lo que tenemos hoy. La pérdida de presupuesto fue constante y sistemática. Proponemos que en diez años podamos recuperar lo que venimos perdiendo hace otros diez. Alcanzar el 30% que supimos tener”, remarca Bielli.
Entre los Objetivos explícitos en las consideraciones del proyecto de ley presentado en la Legislatura se destacan como prioridades:
- Garantizar el efectivo cumplimiento de la cobertura del nivel inicial de gestión pública, estatal, laica y gratuita en el sistema educativo de la Ciudad de Buenos Aires, desde los cuarenta y cinco (45) días hasta los cinco (5) años de edad, tal como lo establece la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires.
- Garantizar el traspaso de los espacios de atención a la primera infancia a la órbita del Ministerio de Educación para su supervisión pedagógica y regulación en conformidad a la ley 27.064, a la ley 26.061 y de la ley Nacional de Educación 26.206.
- Ampliar la oferta de escuelas de jornadas completas de la educación primaria priorizando los distritos escolares del sur de la Ciudad.
- Promover estrategias destinadas a garantizar la inclusión y permanencia escolar.
- Producir las transformaciones pedagógicas y organizacionales que posibiliten mejorar la calidad y equidad del sistema educativo jurisdiccional en todos los niveles y modalidades.
- Fortalecer las propuestas educativas específicas o complementarias con la educación común y promover estrategias y mecanismos que posibiliten la transición de estudiantes a trabajadores, a todos los niños, niñas, jóvenes y adultos/as con discapacidad;
- Erradicar el analfabetismo en todo el territorio de la Ciudad de Buenos Aires;
- Propender al fortalecimiento y expansión de la educación permanente de jóvenes y adultos/as en todos los niveles del sistema.
- Garantizar el acceso, la permanencia y el egreso de todos/as los/as estudiantes del nivel secundario, en todas sus modalidades y orientaciones, de acuerdo a la Ley 898/02 (BOCBA Nº 1542); y la Ley 26.206 de Educación Nacional.
- Garantizar la oferta del nivel superior de gestión pública estatal, distribuida equitativamente en el territorio, de acuerdo al Artículo 24 de la Constitución de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la Ley 24.521 de Educación Superior.
- Desarrollar y expandir las propuestas de la formación técnica y formación técnica profesional impulsando su modernización y vinculación con la producción, el trabajo y el desarrollo científico y tecnológico. Incrementar la inversión en infraestructura y equipamiento de las escuelas y centros de formación profesional;
- Garantizar la enseñanza de Educación Sexual Integral en todos los niveles obligatorios, modalidades y carreras de formación docente, tal como lo indican las leyes 26.150 de Educación Sexual Integral y la Ley 2110/06 (BOCBA N° 2569);
- Promover la integración de las tecnologías de la información y la comunicación en las prácticas educativas, garantizando el acceso a la conectividad y a los dispositivos tecnológicos de todos/as los/as estudiantes y docentes;
- Garantizar la enseñanza de una lengua extranjera.
- Propiciar la educación intercultural bilingüe, tal como establece el art. 52 de la Ley 26.206, con la incorporación del auxiliar docente indígena.
- Fortalecer la formación docente inicial y continua;
- Universalizar la asistencia alimentaria en los establecimientos escolares, e incrementar la calidad del servicio;
- Apoyar y fomentar la participación de las asociaciones cooperadoras en la vida comunitaria.
- Fortalecer los sistemas de becas vigentes según leyes 2917/08 y 1843/05 y propender a la creación de nuevos sistemas de becas con criterios de inclusión y según áreas estratégicas.
- Desarrollar estrategias que tiendan a reducir las brechas de género en modalidades, orientaciones, carreras y trayectos formativos históricamente masculinizados.
Una de las cuestiones centrales que aborda el proyecto es dar cumplimiento a lo establecido en la Ley de Educación Nacional 26.206/06 y sus modificatorias. En tal sentido la legisladora Bielli apunta: “Necesitamos darle previsibilidad a la política educativa. Con este objetivo y para condicionar a los gobiernos de los distritos que no lo consideran prioridad, es que se crearon a nivel nacional la Ley de Financiamiento Educativo, la Ley de Educación Nacional, la Ley de Educación Técnica, la Ley de Ciencia y Tecnología. Son normativas que establecen metas presupuestarias y que permiten pensar políticas a mediano y largo plazo”.
OTRA VEZ A LA CARGA CONTRA EL ESTATUTO DOCENTE
En paralelo a la presentación hecha por el Frente de Todos del proyecto de Ley de Financiamiento Educativo a mediados de marzo, el oficialismo en la Legislatura porteña comenzó otra vez a tratar en comisiones un proyecto de reforma del Estatuto Docente, lo que puso en alerta a los gremios de educadores, quienes exigen ser consultados ante cualquier intento de modificación.
El proyecto de Juntos por el Cambio y sus aliados consta de 40 artículos que promueven al menos 25 modificaciones al actual estatuto, el cual establece los procedimientos de ingreso, permanencia, movilidad y retiro de todos los docentes del sistema de educación estatal.
El Estatuto vigente también define la manera en la cual maestros y profesores acceden a sus cargos, las lógicas de reconocimiento de su capacitación y experiencia y los incentivos propuestos para los ascensos y los salarios de la carrera docente.
El bloque del Frente de Todos anticipó que “la iniciativa no fue discutida ni consensuada con los y las trabajadoras y trabajadores de la educación” y recordó que “los antecedentes del PRO en materia docente no son nada buenos”
Precisamente el Frente de Todos viene denunciando que el presupuesto de la Ciudad en Educación, además de los recortes sistemáticos y continuos, fue subejecutado todos los años de la última década, lo que implica un mayor recorte encubierto sobre el nominal: hubo intentos de cierres de grados, de escuelas para adultos y de cursos para discapacitados, a lo que se suma la falta endémica de vacantes todos los años.
“Es indisociable la necesidad de reivindicar material y simbólicamente la figura del docente de la mano de cualquier modificación que se pretenda del Estatuto” destaca Bielli, quien además ataca la falacia sostenida por el oficialismo sobre la presunta falta de formación de los docentes estatales.
De parte de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), el gremio que concentra la mayor cantidad de afiliados en CABA, el plan oficialista fue rechazado de plano. Según su secretario general, Eduardo López, la “intención es eliminar el Estatuto tal como fue concebido”. Por Ademys, la representante Mariana Scayola sostuvo que, de prosperar la reforma “ya no será el Estatuto la herramienta rectora en el acceso a cargos y a la carrera docente sino la discrecionalidad del gobierno porteño”.
Otro frente de batalla abierto al mismo tiempo, tal como contaba orgulloso en 2014 Esteban Bullrich, cuando aún era ministro de Educación porteño, al hablar de la estrategia de su espacio, del “si pasa, pasa”, con el que buscaban “vencer la resistencia de los sindicatos docentes”.
La ministra porteña de Educación Soledad Acuña insultó de modo directo a maestros y maestras, diciendo que quienes deciden ser docentes en CABA son “cada vez más grandes de edad, eligen la carrera docente como tercera o cuarta opción, luego de haber fracasado en otras carreras” y que, como si fuera un demérito, “pertenecen a niveles socieconómicos bajos” por lo que no poseen un adecuado “capital cultural” para compartir en las aulas. Pero entonces no se detuvo, y criticó además a los institutos de formación y los gremios docentes por “sobreideologización” y vocación de militancia izquierdista, así como instó a la comunidad docente a denunciar de manera activa posibles casos de “bajada de línea”, con métodos de delación dictatoriales.
Acuña disfruta el papel de provocadora serial que asumió con la aprobación de su espacio político y pese a las graves deficiencias de su gestión se hace tiempo cada semana para denigrar o insultar a docentes, personal de la salud y en su última acometida, montada en una nota falsa de Clarín, denostar a los trabajadores estatales en conjunto. Siempre parece dispuesta a subir la apuesta y el último 24 de marzo se despachó con declaraciones negacionistas del genocidio de la última dictadura cívico-militar.
Así están las cosas en la esfera educativa de la Ciudad de Buenos Aires.