Newsletter N° 67 – Nuevo sinceramiento: Macri protagonista, venta de tierras y profundización de brechas en el presupuesto
Mientras el ex Presidente Mauricio Macri desembarca oficialmente en la campaña en la Ciudad para acompañar a la re-convertida en porteña y ex gobernadora bonaersense, María Eugenia Vidal, el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta logró imponer su proyecto para construir torres y edificios en un tercio de las 70 hectáreas que la empresa IRSA posee en Costanera Sur.
Como de costumbre, le sobraron legisladores para imponer su iniciativa, lo que no le sobra -pese a gobernar el distrito más rico del país- es el presupuesto, por eso presentó un pedido para modificarlo. Nunca está de más recordar cómo utiliza sus recursos el Gobierno de la Ciudad, que deja en evidencia las verdaderas prioridades del Pro a la hora de gobernar.
El retorno de Macri ¿como salvataje de la ruptura en la oposición?
Faltando menos de un mes para las primarias electorales Mauricio Macri dio por terminadas sus largas vacaciones europeas y se sumó a la campaña electoral. Dicen que lo fueron a buscar los que decían que espantaba al electorado, no para que sea líder sino para que contenga el espacio de Juntos por el Cambio.
En su primera actividad, Macri se mostró en la Ciudad de Buenos Aires con la ex gobernadora bonaerense y precandidata a diputada nacional, María Eugenia Vidal. Lo mismo hizo luego para respaldar a Diego Santilli, el delfín de Larreta en distrito más poblado del país.
María Eugenia Vidal, por su parte, mantuvo un encuentro con el jefe del SAME y empleado del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Alberto Crescenti, quien le ofrendó un chaleco usado en los rescates de la Tragedia de Once. Como sucedió en 2019, cuando ya había usado esta misma tragedia con una frase que motivó la reacción de los familiares de las víctimas, volvió a ser cuestionada y repudiada en un nuevo intento de usarlos para su campaña política.
Quien la secunda en la lista, el economista Martín Tetaz, también quedó expuesto en estos días cuando dio una entrevista en un medio afín a su fuerza política y quedó evidenciado que no sabe los índices de pobreza e indigencia y que desconoce la tarifa del subte de la Ciudad que pretende representar.
Del lado opositor al oficialismo porteño, el primer precandidato a diputado nacional del Frente de Todos, Leandro Santoro, dio varias entrevistas y adelantó que llevará al Congreso proyectos que tengan que ver con el medio ambiente: “Estamos trabajando en una plataforma con los 10 principales proyectos. Porque para mí el tema de la agenda verde es lo que tiene que cortar transversalmente todo”.
Santoro recorrió el Hospital Ramos Mejía y mientras conversaba con el personal de salud se comunicó con el presidente Alberto Fernández por videollamada, quien le transmitió su respaldo a las enfermeras y los enfermeros que reclaman hace años que se los incluya como parte de la carrera profesional, hecho que el gobierno de la Ciudad rechaza.
Avanza la Ley IRSA y las brechas urbanísticas
No hay semana sin negocios para los amigos en el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta. Esta vez logró esquivar fallos judiciales, informes de impacto ambiental en zonas de humedales y aprobar en primera lectura el proyecto la ley para rezonificar los terrenos de lo que alguna vez se iba a llamar la Ciudad Deportiva de La Boca y permitirle al Grupo IRSA construir un barrio con torres de lujo en la Costanera sur de la Ciudad.
La iniciativa fue aprobada con 37 votos a favor, con los votos de Vamos Juntos, la UCR y el Partido Socialista, mientras que el Frente de Todos (FdT), el Frente de Izquierda y Autodeterminación y Libertad emitieron 20 votos en contra. Ahora habrá una audiencia pública como la de Costa Salguero, para luego intentar concretar el negocio para que haya un “Puerto Madero 2”, con torres de 145 metros.
Los legisladores del Frente de Todos (FdT) señalaron en un comunicado en conjunto que la Legislatura funcionó “como la escribanía de los negocios inmobiliarios de Horacio Rodríguez Larreta” y resaltaron que el proyecto se enmarca “dentro del objetivo del gobierno de Juntos por el Cambio de privatizar la costa de nuestra Ciudad para el disfrute exclusivo de sectores con grande fortunas”.
Asimismo desde el Observatorio del Derecho a la Ciudad también cuestionaron con dureza el convenio inmobiliario entre el Gobierno porteño y la empresa IRSA para edificar torres en el predio de Costanera Sur y remarcaron que “destruirán un humedal para construir un proyecto inmobiliario”.
Cabe recordar que este gran barrio VIP que el Grupo IRSA quiere hacer en la ex Ciudad Deportiva de La Boca, consolida las brechas existentes: mientras se aumenta la cantidad de personas viviendo en situación de calle, en el otro extremo se obtienen beneficios para megaemprendimientos urbanísticos, edificios de lujo y cientos de hectáreas de terrenos públicos destinados al mercado inmobiliario.
Este fin de semana miles de personas participaron de una bicicleteada y abrazo a la Costanera Sur, en rechazo a la iniciativa y entendiendo que con este convenio se generará una ciudad más fragmentada con una zona ribereña de lujo y barrios mediterráneos con deficiencias habitacionales y sin espacios verdes; escenario que complejiza la crisis habitacional que ya se revela en todos los barrios de la Ciudad.
Más presupuesto, ¿para qué?
El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, presentó en la Legislatura un pedido de modificaciones al Presupuesto General por un total de 81.764.969.738 de pesos. La petición será evaluada mañana en la reunión de la comisión de Presupuesto y Hacienda de la Legislatura y, según se explicó, en los considerandos, más de 25 millones de pesos se destinarán al pago de salarios de los empleados de la Ciudad.
También se destinarán más partidas para la adquisición de medicamentos y otros insumos para el Sistema de Salud, en función de la mayor demanda como consecuencia de la pandemia, productos lácteos para el Ministerio de Educación, y combustibles y lubricantes para el Ministerio de Justicia y Seguridad. Además habrá más fondos para el Instituto de Seguridad Pública y la Policía de la Ciudad; del mismo modo, entre otras cuestiones.
A propósito, llama la atención que el presupuesto porteño en salud se haya reducido sostenidamente entre 2012 y 2019, último año en el que ese dato está disponible, cuando retrocedió de 23% a 14,8%, según estadísticas de la Dirección General de Estadísticas y Censos de la Ciudad. A la vez, un informe de la Universidad Nacional de Avellaneda (Undav) sostiene que el presupuesto destinado a Salud en 2021 es, ajustado por una inflación proyectada menor a la que efectivamente hubo: 9,4% más bajo que en 2019. No obstante, en una entrevista reciente el Ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, negó que el presupuesto esté a la baja y justificó que las partidas se vieron modificadas porque aparecieron nuevas funciones de la Ciudad, como la de la Policía.
Al respecto, recordemos que el traspaso de la Policía de Nación a Ciudad, además del aumento discrecional de la coparticipación, implicó un incremento muy considerable en los gastos en seguridad de la Capital Federal, que en 2019 gastó mensualmente un 60% más que la Provincia de Buenos Aires en gastos de seguridad por cada efectivo de seguridad.
Retomando el eje o argumento de aumentar el presupuesto para destinarlo a la Salud, ATE Hospitales denunció a mediados de julio, cuando encabezó un paro de 48 horas en instituciones del sistema de salud pública de la Ciudad, que los salarios de los enfermeros oscilan entre los 40.000 y los 45.000 pesos, y esos trabajadores no están incluidos en el escalafón salarial de profesionales de la salud.
En las últimas horas los trabajadores y trabajadoras de la salud pública de la Ciudad de Buenos Aires volvieron a convocar a un paro de 24 horas para exigir al gobierno de la Ciudad mejores condiciones laborales, en el marco de una pandemia que los tiene como primera línea de batalla. La medida está convocada para mañana y estará encabezada por la agrupación de ATE Hospitales de la Ciudad.
Gobiernan para girar fondos públicos a los intereses privados
Aún continúa el invierno y el Gobierno de la Ciudad ya se ha fugado gran parte de sus recursos en gastos que hemos enumerado en reiteradas oportunidades, publicidad, consultoría y veredas son las más comunes. Mientras el personal de la Salud ha puesto el cuerpo y el bolsillo para enfrentar la pandemia, mientras la educación pública se achica y las tierras públicas son vendidas para que los amigos puedan hacer aún más negocios privados, se incrementa la desigualdad y el castigo a los más vulnerables.
Mientras, el Ejecutivo porteño pide que se aumente el Presupuesto. ¿Presupuesto para qué? Para pagar salarios, dicen. Pero las exigencias de campaña suenan más creíbles a la hora de pensar explicaciones reales. Las brechas sociales, urbanas, ambientales y económicas aumentan. El presupuesto también, pero no para disminuir la desigualdad, sino para seguir ejecutando una política fundada en los negocios y en la especulación.