Newsletter N° 37 – Arrancó el 2021 recargado
Debate sobre la vuelta a clases, interna de Juntos por el Cambio y privatización de tierras
Comenzó el año y, mientras la pandemia del Covid-19 presenta un fuerte rebrote en todo el país -especialmente en la Ciudad de Buenos Aires- hay temas que parecieran ser innegociables. El regreso a las clases presenciales, la interna política en Juntos por el Cambio -con el sorteo de obstáculos que tiene Larreta para consolidarse en su ambiciosa carrera presidencial- y la consolidación de la venta de las tierras públicas como modelo de proyecto de Ciudad.
El regreso a la presencialidad escolar
El Gobierno nacional anunció que en marzo volverá un esquema de clases presenciales de manera progresiva, asimismo el Jefe de Gabinete Santiago Cafiero adelantó que en febrero se iniciará la vacunación del personal docente.
Mientras tanto, el Ejecutivo porteño ratificó su objetivo de volver a la presencialidad en las escuelas a como dé lugar en febrero. En la Ciudad los casos de COVID crecen a diario, por esta razón distintos especialistas de la salud sugirieron que de comenzar las clases en febrero, Larreta debería ponerse a trabajar ya mismo para vacunar a la comunidad docente ya que queda poco tiempo.
Por su parte, los gremios siguen con objeciones y señalan que “el aumento de contagios en la Ciudad de Buenos Aires y la falta de espacios adecuados en los edificios escolares para el desarrollo de actividades sin descuidar la salud, hacen que no estén dadas las condiciones epidemiológicas ni de infraestructura para el retorno a las clases presenciales el 17 de febrero”.
El comienzo de año no trae novedades, el problema de las vacantes en la educación pública se agudiza y los recortes de los planes para entregar computadoras se profundizan. De hecho, desde el Frente de Todos denunciaron que el Gobierno de la Ciudad recortó 371 millones de pesos al Plan Sarmiento para entregar computadoras a los estudiantes de escuelas públicas y lo transfirió para el presupuesto de escuelas privadas.
La denuncia también advierte que hubo un recorte en infraestructura escolar del 78% desde 2019 hasta este año y que el presupuesto educativo tiene la participación más baja sobre el total de la historia de la Ciudad: 17,18%.
La carrera (e interna) opositora hacia el 2023
Admitiendo un rebrote en su distrito, Horacio Rodríguez Larreta reapareció en escena tras haber contraído Covid-19. La vuelta a la actividad pública fue junto al dirigente de River, Rodolfo D’Onofrio, a quien busca sumar a su proyecto político.
En el arranque del año, el mandatario porteño apunta a ajustar las relaciones en la cúpula máxima de la coalición opositora y por ello también se reunió con el gobernador radical Gerardo Morales.
Pero el avispero en la política opositora está revuelto, por un lado Elisa Carrió se asomó anunciando que podría ser candidata a Gobernadora de Buenos Aires. Luego de abandonar la política, la ex diputada volvió y -con los tapones de punta, como es su costumbre- se metió en la interna de la UCR y luego en la propia interna del PRO contra Cristian Ritondo y Emilio Monzó, a quienes acusó de tener un acuerdo secreto con Sergio Massa y Máximo Kirchner para “copar las listas”.
También hay rumores de una posible participación de Mauricio Macri en las listas bonaerense de Juntos por el Cambio de este año y queda en suspenso el rol que tendrá María Eugenia Vidal, principal aliada del Jefe de Gobierno porteño.
En tanto, para enfrentarse a Larreta y construir poder propio, Patricia Bullrich cree que el porteño podría proponer a Fernán Quirós como su candidato a Diputado en las próximas elecciones y la titular del Pro quiere impulsar a Ricardo López Muprhy para el segundo lugar en la boleta, con la idea de “ampliar” la coalición. Veremos cómo se ordena el año opositor.
Los guiños hacia la derecha, en tiempos de previa electoral, también alcanzan al larretismo (que se autopercibe y promociona de “centro”). El vicejefe de Gobierno Diego Santilli expuso públicamente su postura del punitivismo sobre los jóvenes y fiel a la ideología represiva, consideró que “es hora de rediscutir la Ley Penal Juvenil”.
Privatizaciones y precarización de políticas públicas de vivienda
Mientras, continúa la Audiencia Pública convocada por la Legislatura porteña sobre la rezonificación y posterior privatización de tierras ribereñas donde actualmente se encuentran Costa Salguero y Punta Carrasco. Más de 7000 vecinas y vecinos se inscribieron, la mayoría para expresar su rechazo a la iniciativa oficial y proponer la creación de un parque público en esas tierras.
Uno de los argumentos que se reiteran es que el oficialismo porteño profundiza el extractivismo inmobiliario y el objetivo actual es convertir a Costa Salguero, una zona que se publicitó como ‘Distrito Joven’, en torres para los ricos, mientras los jóvenes son inquilinos crónicos y apenas pueden soñar con una vivienda propia en la Ciudad donde nacieron o donde buscan desarrollarse profesionalmente.
Asimismo, se destaca que la Ciudad tiene un porcentaje de espacios verdes mucho menor al recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo que “impacta en la salud”. De acuerdo con datos oficiales del Gobierno porteño, la Ciudad de Buenos Aires tiene 6,1 metros cuadrados de espacio verde por habitante, mientras que la OMS recomienda al menos 10.
En tanto, el Colectivo de Arquitectas en Defensa de la Tierras Públicas advirtió que el Gobierno de la Ciudad incluyó en su Plan Plurianual de Inversiones unos “5.600 millones de pesos en infraestructura sanitaria” para los edificios que proyectan construirse en Costa Salguero, aunque la ley de rezonificación todavía no fue aprobada.
Uno de cada 7 porteños vive en barrios sin urbanizar, dato que expresa que la Ciudad consolida el despojo de los bienes comunes a partir de la privatización de más 500 hectáreas de tierras públicas y, como consecuencia, la precarización de las políticas públicas. El Pro gobierna la Ciudad desde 2007 y recién en 2016 puso en marcha una política de integración focalizada en algunos Barrios Populares. Uno de los aspectos distintivos en las intervenciones llevadas a cabo, es la ausencia de mecanismos genuinos de democracia participativa para sus habitantes.
Nuevo año, viejo proyecto: para el Pro lo privado mata lo público
La demanda por la vuelta a clases presenciales ya se nacionalizó y hay consenso en todo el arco político, resta acordar con los gremios, extremar los protocolos y priorizar la campaña de vacunación para la comunidad docente. La comunidad educativa, los representantes políticos de las distintas jurisdicciones y la realidad misma muestra la urgencia en trabajar activamente para que los niños, niñas y adolescentes puedan recuperar su espacio de pertenencia, de educación, de contención e integración. Pero eso no podrá ser a costa de la salud de la sociedad. No es cuestión de marketing o publicidad. Lo que exige el momento es creatividad, compromiso y políticas activas para combinar salud y educación.
Sin embargo, el 2021 no parece traer consigo mucha novedad. Horacio Rodríguez Larreta además de consolidar el ajuste propio del Pro, desde 2007 gobierna la Ciudad con la tijera en la mano para las áreas más sensibles y apuesta todas las fichas a su carrera presidencial.
La educación pública en la Ciudad de Buenos Aires no parece tener un mejor destino que el de las tierras públicas, cada vez más achicadas en beneficio de lo privado.