LA EDUCACIÓN CON FECHA DE VENCIMIENTO – Cierre de secundarias nocturnas y UniCABA
Como todos los años, la época de verano en la Ciudad no es ajena a conflictos en materia educativa. A los reclamos por falta de 12.000 vacantes en establecimientos educativos de la Ciudad y el calvario de las familias para que sus hijos/as puedan iniciar el ciclo lectivo, se suma el cierre de escuelas secundarias nocturnas y la incertidumbre de miles de estudiantes y trabajadores de la educación.
Con la resolución 4055/2018 la Ministra de Educación, Soledad Acuña, decidió el cierre paulatino de 14 escuelas comerciales nocturnas, y cursos en 9 liceos y bachilleratos nocturnos. Dejando fuera del sistema educativo a más de 10.000 alumnos/as y sin trabajo a más de 1200 trabajadores/as. Con el argumento de una “desactualización en los planes de estudio”, esta medida atenta principalmente contra los/as estudiantes que trabajan o que tienen hijos/as a cargo, para quienes este tipo de modalidad es la única opción posible de culminar sus estudios secundarios.
El cierre de secundarias nocturnas se suma a las medidas restrictivas de Horacio Rodríguez Larreta en educación: ajuste presupuestario, emergencia edilicia, falta de vacantes, cierres de lactarios, traslados como los de la Escuela de Cerámica, el Yrurtia, los IFTS o el Romero Brest. También cabe destacar el polémico proyecto de creación de la Universidad Docente (UniCABA), cuyas intenciones iniciales eran unificar este sistema en un único nivel (universitario) y en una sola institución, y en consecuencia el cierre de los 29 institutos terciarios públicos de la Ciudad. Desde el inicio del período legislativo en la Legislatura Porteña, la comunidad educativa se encontró en pie de lucha y movilización, esgrimiendo las razones por las cuales este proyecto de ajuste era un claro retroceso para la Ciudad. Producto del unánime rechazo y la amplia movilización, el ejecutivo planteó la coexistencia de los profesorados con la UniCABA. Sin embargo, si bien los profesorados no se disuelven, deberán pasar por un proceso de evaluación institucional y según la comunidad educativa, la coexistencia representa la “muerte lenta” de los profesorados.
La resolución de Acuña sobre el cierre de las escuelas nocturnas mantiene nuevamente a docentes, estudiantes y familias en alerta y con la posibilidad del no inicio de clases para el Ciclo Lectivo 2019. Según la Universidad Pedagógica Nacional, 420.000 porteños/as no finalizaron sus estudios secundarios. Actualizar los planes de estudio y ampliar la oferta educativa no parece ser la solución para el Gobierno de la Ciudad, sino que opta por retirar el Estado de quienes más lo necesitan.